El que resiste gana.

Esta es la frase que inspiró al Dúo Dinámico a componer una canción, que con en el transcurso de los años ha servido a mucha gente como herramienta de motivación.

Lo ideal hubiera sido que nadie hubiera tenido que rescatarla nunca de la memoria de los más mayores y convertirla en un himno para estos días convulsos que nos está tocando vivir.

Es muy probable que ellos no pensasen nunca en el impacto que una simple canción tendría de bueno en mucha gente algunos años más tarde.

Es normal, porque casi ninguno de nosotros es consciente muchas veces del impacto que nuestras acciones tienen en otras personas.

Nosotros no somos una excepción y sin pensarlo mucho, nos pusimos a grabar una versión de Resistiré un poco particular. Con músicos, instrumentos y cantantes un poco particulares.

Un vídeo que surgió de un grupo de Whatsapp con el único pretexto de echarnos unas risas y de no perder el contacto y la relación en un grupo de amigos que tiene su origen en la comparsa de carnaval de la Escuela Infantil Soletes.

Nos lo pasamos muy bien haciéndolo, sinceramente.

Y por supuesto, como seguramente le pasó al Dúo Dinámico, tampoco se nos pasó por la cabeza en ningún momento el impacto que todo esto podía tener en otras personas.

A día de hoy, el vídeo tiene más de 3.000 visualizaciones en Youtube y un montón de comentarios en los perfiles de las redes sociales de todos los que lo hemos compartido. 

Lo mejor vino después.

Más allá de las risas que provocamos en todos los que nos conocían por vernos en esa situación de tratar de imitar a cantantes de prestigio, la recompensa, vino de saber que a mucha gente le estaba sirviendo para levantar el ánimo en momentos puntuales.

De saber, que involuntariamente estábamos llevando un mensaje de fortaleza a gente que, por las circunstancias, estaba atravesando por momentos difíciles.

A gente a la que conseguimos sacar una sonrisa o hacerle, por unos minutos, olvidarse de la tragedia que supone perder a un ser querido.

Dentro de nuestras rutinas y de la locura particular de cada uno, todos y todas los que participamos en ese vídeo nos sentimos totalmente recompensados. 

Sentimos que somos útiles.

No somos héroes, pero tenemos la sensación de que gracias a un pequeño gesto hemos conseguido grandes cosas, al menos, durante los cuatro minutos que dura el vídeo.

Al final toda esta situación que nos está tocando vivir, la van a terminar solucionando las personas.

Con gestos como el que nosotros hemos hecho.

Pequeños gestos que requieren poco esfuerzo y poco talento como imitar a unos cantantes en un vídeo musical, o grandes gestos como cuidar de un enfermo o de una persona mayor, sin más protección que la que te ofrece una bolsa de basura o unas gafas de buceo.

O grandes gestos, como tener que ir cada día a trabajar a un supermercado o a repartir fruta para que al resto no nos falte de nada, jugándose literalmente la vida y sin saber cuando llegas por la mañana, con qué o con quién te vas a encontrar hoy. ¿Verdad María?. ¿Verdad Vicen?.

O grandes gestos, como los de muchos profesores y profesoras que en estos días multiplican sus esfuerzos y su capacidad de trabajo para que sus alumnos y alumnas puedan seguir aprendiendo y mejorando cada día, casi como si nada de esto hubiera pasado. ¿Verdad Edu?.

Insisto en que no somos héroes. 

Es solo, que todos y todas las que aparecemos en ese vídeo, un día, tuvimos la habilidad de rodearnos de buena gente.

Cuando te rodeas de buena gente, la vida te empieza a cambiar para mejor.

Conoces a gente que te motiva a hacer cosas chulas como esta, o te motiva para hacer cosas que sean capaces de alegrar al día o sacarle una sonrisa a cualquiera y todo mejora.

Todo lo que rodea a la Escuela Infantil Soletes va un poco en esa sintonía. 

Gente que está siempre dispuesta a colaborar con lo que le pidan.

Gente que derrocha generosidad, optimismo, alegría y la fuerza suficiente como para hacer disfraces o carrozas de carnaval con la misma ilusión que locuras como aparecer en un vídeo imitando a unos cantantes.

Gente, que consigue cosas.

A veces fáciles como hacer un disfraz de carnaval y organizar una comparsa de más de trescientas personas y a veces difíciles como sacarle una sonrisa a alguien.

Así es la gente de Soletes.

Y por último, un recuerdo emocionado para todos aquellos héroes sin capa que están aguantando como campeones y campeonas todos estos días de encierro necesario. Nuestros niños y niñas.

Pasaron en pocos días de estar olvidados a ser los grandes héroes de toda esta situación.

Héroes silenciosos en algunos casos y héroes ruidosos en la mayoría, pero al fin y al cabo héroes y heroínas.

Al final, no queda otra que…

Resistir para volver más fuertes.

¡Ánimo, un día más es un día menos para volver a juntarnos!

Pd: Cuando el vídeo iba por mil quinientas visualizaciones, y viendo que la cosa iba subiendo, Juan puso la batería con la que sale en el vídeo a la venta en Wallapop y le duró un tris. Terminó vendiéndosela a un grupo de heavy metal de segunda regional preferente. ¡Que crack el tío!.